domingo, 2 de agosto de 2015

Discurso de Pablo Montoya Campuzano al recibir el premio Rómulo Gallegos


Desde tiempos antiguos el hombre ha puesto de manifiesto su sensación de desamparo ante el horizonte que el mundo y sus sociedades le han ofrecido. Es una permanencia tan inobjetable que me atrevería a pensar que es ella la que sostiene ese particular tinglado que hemos convenido en llamar arte. El desamparo está, como una marca indeleble, en el tramo que va del nacimiento a la muerte. Yo me he apoyado en esta certeza para escribir la novela que ha sido merecedora del premio Rómulo Gallegos este año. La frase “nuestra condición es el desamparo” la tomé de Reinaldo Arenas, ese cubano alucinante que atravesó un mundo poblado de persecuciones. Pero sé que ella la pudo haber dicho Homero, Ovidio o Marco Aurelio. Que fue el asidero de Dante, Villon o Pascal. Que se envolvieron en sus pliegues Montaigne, Shakespeare y Cervantes; y más tarde Melville, Dostoievski y Kafka....





Leer discurso completo aquí


https://drive.google.com/file/d/0B9uHanxBoJ1WaWwzNmVGaVVvVEE/view?usp=sharing

No hay comentarios:

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...